luns, xullo 09, 2007

Del funcionamiento del periodismo.

En algún lugar de la página 45 falta una coma, por voluntad consciente o incosciente del linotipista de turno que dejó de ponerla ese día, a esa hora, en esa máquina; cualquier desequilibrio que este error ocasione al mundo es responsabilidad suya.



(Augusto Monterroso, FE DE ERRATAS Y ADVERTENCIA FINAL, en Movimiento perpetuo).




Hace cosa de un año, tras escribir para la sección Quién no es quién de esta bitácora una biografía del maestro Sabino Ordás, Miguel Ángel González me animó a que la convirtiera en artículo y se comprometió a hacer lo posible para que la publicasen enviándoselo a un amigo suyo, redactor de Diario de León. Así lo hice y el resultado fue En los cien años de Sabino Ordás, artículo que pueden leer pulsando aquí.

Como realmente, cuando llegó al Diario, ya corría el año ciento uno de la vida del maestro de Ardón y los periódicos son rehenes de la “actualidad” el texto no fue publicado aunque me dijeron que era interesante.

El pasado 30 de abril don Sabino volvió a ser carne de noticia tras la aparición de un libro de sus más cimeros discípulos (Aparicio, Mateo y Merino, ya saben) que Ordás prologa con la maestría de siempre. El Diario le dedicó una página de su sección de CULTURA dividida en cuatro partes:

la primera dedicada a la presentación del libro,

la segunda transcribe la reseña editorial del volumen,

la tercera copia parte del prólogo de don Sabino

y la cuarta habla del maestro de Ardón.

La página la firma Emilio Gancedo, el redactor amigo de Miguel Ángel y cuando vi el retrato de don Sabino que acompaña la noticia me dije «Algún efecto tuvo el artículo que le envié» Luego leí el texto que comienza diciendo:

Dicen que tiene ya cien años, aunque nadie lo sabe a ciencia cierta y en ese punto es un poco como don Victoriano Crémer. El hecho es que Sabino Ordás, el filósofo de Ardón que nació en alta mar a bordo del buque Covadonga, ha reaparecido para firmar el prólogo de esta obra, […]

Mis ojos volvieron atrás ¿Nació en alta mar a bordo del buque Covadonga?

Les ruego que lean mi biografía, ahí en la columna de la derecha,… Supongo que Gancedo buscó algo de documentación sobre el maestro y el buscador electrónico le trajo a esta Constelación y mezcló algunos datos. Sabino Ordás, hasta donde yo sé, no es naonato como un servidor sino que nació en Ardón y no en un barco que regresaba de América. Después sí tuvo que marchar a América y quizá lo hiciera desde Vigo en el trasatlántico que, años después, me vería nacer a mí. Pero eso debiera decirlo él y no yo.




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