La semana pasada (sí, en pleno mes de mayo) me llegó la felicitación de Navidad de mi amigo Rodrigo Osorio. Como suele ser su costumbre era un cuento relacionado con uno de los magos de Oriente. Tras el relato en un P.S. se justificaba: Como el examen no me permitió enviártela en su momento aquí tienes ahora la felicitación de Navidad. ¡Muy feliz Navidad todo el año! Con su permiso comparto el cuento a través de la Constelación:
© Gabriel Brau Gelabert.*
DON BALTASAR.
Al día siguiente de su partida los acreedores hicieron valer las prendas que el mago había dado para poder costearse el viaje y pagar la mirra. «Está loco, se ha marchado persiguiendo una estrella. Está claro que no va a volver.», dijo uno de los usureros ante el juez. Las esposas e hijos del astrónomo apenas supieron cómo defenderse («Es verdad. Está loco», pensaban) y se limitaron a contemplar con pena como los alguaciles se llevaron las cabras y la vaca, cercaron las fincas y fijaron el foro que deberían pagar si querían seguir habitando su casa y labrando la huerta que el magistrado consideró «suficiente para su subsistencia». Las esposas, que no confiaban en el regreso del mago, contrajeron nuevos matrimonios. Al frente de la casa quedaron dos de sus hijos, los mayores.
Meses después don Baltasar regresó al pueblo con la Buena Nueva. Había parado en todas las aldeas del camino para contar los signos que acompañaron al nacimiento de Jesús. «Sin la más mínima duda: es Emmanuel», acababa siempre su relato. Sus hijos no le dejaron entrar en casa «Eres nuestra ruina. Un inconsciente. ¡Vete!» Él los comprendió. Dejó atado su caballo a la puerta y en las alforjas todo lo que quedaba de su equipaje (la túnica de los domingos, su espada y el astrolabio), «ya no los necesitaré más». Se fue a otras tierras a comenzar una vida nueva. Continuó mirando estrellas pero dejó de medirlas.
*La foto que acompaña el cuento también venía con la felicitación. Su autor es Gabriel Brau Gelabert y fue premio Caja España 2006 de fotografía, según me dice Rodrigo.
ADDENDA: Don Gabriel se puso en contacto conmigo tras ver su foto en la Constelación. Les recomiendo que visiten su cibersitio (pueden hacerlo pulsando aquí) para ver esta y otras de sus fotos en reproducciones de mejor calidad. La foto que ilustra la felicitación de Navidad de Rodrigo se titula Cazador Dogón y es la número veinticinco de la galería titulada Luces de África.
2 comentarios:
Medir las estrellas no les resta un ápice a su belleza.
Estoy totalmente de acuerdo contigo, Ricardo, y le preguntaría a Rodrigo lo que quiso decir pero él no suele querer interpretar sus cuentos. Dice que han de ser los lectores quienes lo interpreten porque a ellos pertenece esa facultad."Una vez escrito el relato puede llegar a decir cosas que ni el que lo escribió pretendía decir y descubrirselas a él mismo (o los lectores al leerlo se las descubren al autor)"
Gracias por tu comentario.
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