O que Fernando Pessoa escreve pertenece a dúas categorías de obras, as que podemos chamar ortónimas e heterónimas. Não se poderá dizer que são anónimas e pseudónimas, porque deveras o não são. A obra pseudónima é do autor em sua pessoa, salvo o nome que assina; a heterónima é do autor fora da súa pessoa, é de uma individualidade completa fabricada por êle, como seriam os dizeres de qualquer personagem de qualquer drama seu.
“Lo que escribe F. Pessoa se puede dividir en dos clases de obras, que podemos llamar ortónimas y heterónimas. No se puede decir que son anónimas y seudónimas, porque realmente no lo son. La obra seudónima es de la persona del autor excepto por el nombre que la firma, la heterónima es del autor fuera de su persona, de una individualidad completa fabricada por él, como serían las palabras de cualquier personaje de cualquiera de sus obras” [Traducción SBL]
No conozco mejor explicación de lo que es un heterónimo que esta que Fernando Pessoa publicó en el número diecisiete de la revista Presença.
Yo siempre he creído que el término apócrifo se empleaba para hacer referencia a las “obras falsas” pero no pocas veces (cfr. Introducción de don Manuel Alvar a la Poesía Completa de A. Machado en la Colección Austral o el discurso de ingreso en la Real Academia Española de don Luis Mateo Díez) se utiliza como sinónimo de heterónimo, en el sentido pessoano. De los diccionarios sólo el María Moliner confirma mi creencia previa al señalar:
APÓCRIFO: (del lat. apocryphus, del gr. apókryphos) adj. Fabuloso, supuesto o fingido. Se emplea sólo con referencia a libros, escritos u obras de arte como “falsificados”.Falso: no auténtico, no del autor o del origen que se le atribuye (…)
el resto de libros de consulta definen lo apócrifo como cosa falsificada o fingida.
Siendo estrictos más falso (más apócrifo) es el autor heterónimo –que no pasa de ser un “personaje con obra propia”- que sus escritos, que no sólo existen sino que además tienen consistencia material. ¿Qué diferencia hay entre un libro de poemas ortónimos de Pessoa y otro publicado por uno de sus heterónimos?
Hace tiempo Rodrigo me pregunto si toda la obra de un heterónimo era apócrifa y, pese a mi opinión inicial, he de responderle que no toda. Sólo la que no ha acaecido porque los heterónimos, al igual que sus autores, pueden pergeñar libros falsos pero los autores apócrifos se creen para dotarles de una obra real, si no tienen obra no pasan de la categoría de personajes. (Aunque la frontera entre heterónimo y personaje tampoco es fácil de determinar)
Uno de los propósitos de Los archivos de la O.P.A. es dar noticia de los heterónimos y sus obras pero cuando uno se interna en este mundo debe andar con mil cautelas. Evidentemente los autores de estos juegos tienen vocación de falsificadores y los estudiosos de estas metaficciones –otro día delimitaré, dentro de mis posibilidades, el término metaficción- suelen sentir tanta admiración por la mistificación que pocas veces se resisten a continuar la ficción añadiendo datos falsos en sus ensayos sobre la mentira.
Un compromiso: Las reseñas y comentarios que escriba bajo el título “Archivos de la O.P.A.” sólo contendrán, en la medida que yo sea capaz de discernirlo, datos acaecidos referentes a este mundo metaficticio. No aportaré imaginación por mi parte.
“Lo que escribe F. Pessoa se puede dividir en dos clases de obras, que podemos llamar ortónimas y heterónimas. No se puede decir que son anónimas y seudónimas, porque realmente no lo son. La obra seudónima es de la persona del autor excepto por el nombre que la firma, la heterónima es del autor fuera de su persona, de una individualidad completa fabricada por él, como serían las palabras de cualquier personaje de cualquiera de sus obras” [Traducción SBL]
No conozco mejor explicación de lo que es un heterónimo que esta que Fernando Pessoa publicó en el número diecisiete de la revista Presença.
Yo siempre he creído que el término apócrifo se empleaba para hacer referencia a las “obras falsas” pero no pocas veces (cfr. Introducción de don Manuel Alvar a la Poesía Completa de A. Machado en la Colección Austral o el discurso de ingreso en la Real Academia Española de don Luis Mateo Díez) se utiliza como sinónimo de heterónimo, en el sentido pessoano. De los diccionarios sólo el María Moliner confirma mi creencia previa al señalar:
APÓCRIFO: (del lat. apocryphus, del gr. apókryphos) adj. Fabuloso, supuesto o fingido. Se emplea sólo con referencia a libros, escritos u obras de arte como “falsificados”.Falso: no auténtico, no del autor o del origen que se le atribuye (…)
el resto de libros de consulta definen lo apócrifo como cosa falsificada o fingida.
Siendo estrictos más falso (más apócrifo) es el autor heterónimo –que no pasa de ser un “personaje con obra propia”- que sus escritos, que no sólo existen sino que además tienen consistencia material. ¿Qué diferencia hay entre un libro de poemas ortónimos de Pessoa y otro publicado por uno de sus heterónimos?
Hace tiempo Rodrigo me pregunto si toda la obra de un heterónimo era apócrifa y, pese a mi opinión inicial, he de responderle que no toda. Sólo la que no ha acaecido porque los heterónimos, al igual que sus autores, pueden pergeñar libros falsos pero los autores apócrifos se creen para dotarles de una obra real, si no tienen obra no pasan de la categoría de personajes. (Aunque la frontera entre heterónimo y personaje tampoco es fácil de determinar)
Uno de los propósitos de Los archivos de la O.P.A. es dar noticia de los heterónimos y sus obras pero cuando uno se interna en este mundo debe andar con mil cautelas. Evidentemente los autores de estos juegos tienen vocación de falsificadores y los estudiosos de estas metaficciones –otro día delimitaré, dentro de mis posibilidades, el término metaficción- suelen sentir tanta admiración por la mistificación que pocas veces se resisten a continuar la ficción añadiendo datos falsos en sus ensayos sobre la mentira.
Un compromiso: Las reseñas y comentarios que escriba bajo el título “Archivos de la O.P.A.” sólo contendrán, en la medida que yo sea capaz de discernirlo, datos acaecidos referentes a este mundo metaficticio. No aportaré imaginación por mi parte.
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