luns, marzo 20, 2006

Soy masón, de Pablo Carbonell.

Hace un par de semanas en La Mandrágora-Ensayo General (el programa de actualidad teatral de La 2 de Televisión Española) entrevistaron a Pablo Carbonell que, además, interpretó un tema que no he localizado en ninguno de los discos que ha editado. Se titula Soy Masón y es, entre otras cosas, una crítica demoledora y lisérgica a todas las paparruchas conspirativas y pseudoespirtuales que inundan el mercado periodístico y literario sin perder un ápice del humor surreal marca de la casa. La transcripción de la letra, que tampoco he logrado encontrar en internet, se la debo a la generosidad de Ana Badía.



SOY MASÓN
Pablo Carbonell

Yo tomo copas con quien decide qué está bien y que está mal
y conozco al responsable de la extinción del Neardenthal.
En mi jardín reposa la nariz de la esfinge de Gizeh
y leo en mi sofá las tablas que le dictó Dios a Moisés.
Atesoro el conocimiento de los astrónomos islámicos
y de las plantas aromáticas sus poderes nocivos y balsámicos.
Yo diseñe el engranaje del sellado de las pirámides
y el plano urbanístico de la ciudad de Nínive.
Puedo leer lo que no está ni siquiera escrito entre líneas
y financié las leyes de Mendel sobre ratones y gramíneas.
Poseo el calendario de eclipses hasta que mueran la luna y el sol
y duermo la siesta en el sarcófago dorado de un faraón.

Soy masón
Soy masón
Soy masón...

Me sé los trucos del más taimado tahúr
y el emplazamiento exacto de las pecas del culo de Julianne Moore.
El abecedario de una tribu gangosa del río Amazonas
y el recorrido de las cloacas de toda la antigua Roma.
Sé descifrar los jeroglíficos escritos en los campos de heno
y, no se ría, decodifico el mugido del apareamiento del reno.
Puedo predecir el itinerario del vuelo errante de las moscas
y me llevo un porcentaje de todos los chiringuitos de la costa.
Conozco la clave de los criptogramas de las catedrales góticas
y puedo someterte a través de mis habilidades hipnóticas.
En mi biblioteca de puño y letra los códices del rey Salomón
y el arca de la alianza la tengo de mueble-bar en mi salón.

Soy masón
Soy masón
Soy masón...

Puedo compaginar la sabiduría de Lao-Tse y Confucio
y, sí señora, me sé el truco de los huevos rotos de Lucio.
Manejo el resorte que convierte al pobre en rico
porque domino el lenguaje de la espada y del abanico.
He pernoctado en las ermitas de todos los castillos
y he lucido las armaduras de todos su pasillos.
Yo era una de las sombras que viste en el incendio del Windsor
y abrí por vez primera el sepulcro de Jesucristo,
la piedra filosofal la tengo junto a la sal en la cocina
y recogí la cabeza de María Antonieta según salió de la guillotina.
Puedo surcar los siete mares con un compás y un cartabón
y conozco los rincones que tú ignoras de tu propio corazón

Soy masón
Soy masón
Soy masón…

5 comentarios:

Casual Gamer dixo...

Hola,

Interesante...

Por cierto, no puede ser muy antigua, por la referencia al windsor (salvo edición de última hora)

Saludos

Sergio B. Landrove dixo...

Saludos.

Debe pertenecer a su último espectáculo o disco que quizá aún no haya salido a la venta y estaba presentando en la tele.

En todo caso te aseguro que cantada por el gan mucho en humor.

Un abrazo.

Ricardo Chao Prieto dixo...

Es de lo mejor que he leído: a ver si se puede conseguir pronto la canción de marras. Mucha crítica "velada" a cierto Código de cuyo nombre no quiero acordarme

Sergio B. Landrove dixo...

Cantada gana mucho, como le dije al casual gamer. La verdad es que hacía falta una respuesta así a tanta mamarrachada conspirativa.

Anónimo dixo...

pablo ha cantado esta canción en la convencion de verano de tecnocasa madrid.